Alianza entre Ocyan y UFRJ desarrolla prototipos en 3D para sector de petróleo y gas

Con el objetivo de promover el desarrollo científico y tecnológico, además de fortalecer las relaciones con la comunidad, Ocyan por medio de su programa de responsabilidad social, Escuela en Acción, lanzó el Proyecto Mentoría Joven. El proyecto, desarrollado en alianza con los alumnos de Ingeniería de UFRJ del programa Innovar y Aprender en Macaé, cuenta con la participación del equipo de Ingeniería y Subsea de la unidad de negocio Perforación de Ocyan como mentores de los alumnos. Los alumnos de la UFRJ Macaé desarrollaron dos prototipos que traen soluciones para aplicación en las sondas de perforación de la empresa, satisfaciendo demandas de las áreas de mecánica y construcción submarina (subsea).

Las soluciones fueron desarrolladas en una impresora 3D y en la cortadora a laser donadas en marzo de este año por la empresa al Núcleo de Gestión e Investigación de la UFRJ (unidad Macaé). De abril a octubre, los mentores orientaron a los alumnos en etapa: desde el desarrollo hasta la construcción de los prototipos. El desafío para el área de mecánica fue la creación de un soporte para regla de precisión para agilizar el trabajo regular de inspección de los ejes de los motores diesel de las embarcaciones.

“Con la adaptación de la herramienta e inclusión de tecnología, conseguimos que ahora la inspección la haga también de forma segura una sola persona. La inspección era de difícil ejecución y registro. Era necesario el uso de dos manos, dejándola poco ergonómica para análisis y registro de los resultados. Creamos un design propio y ha hicimos pruebas exitosas en el propio motor”, cuenta Isaac Florêncio Oliveira, integrante del área de Ingeniería de Ocyan y uno de los mentores participantes del programa.

También de acuerdo con Isaac, el trabajo desarrollado con los alumnos fue esencial. “Ellos demostraron de forma muy precisa el conocimiento en automación industrial y la capacidad de resolución de problemas alineado con el compromiso de hacer todo esto de forma sostenible y a bajo costo”, comenta.

El alumno Gabriel Lobo, de 23 años, que está en el 10º período de Ingeniería Civil y fue uno de los alumnos participantes del proyecto e idealizador del prototipo, relata la importancia de la experiencia: “Ésta fue una oportunidad importante para ampliar mis conocimientos en el área de petróleo y gas, ya que ningún curso aquí aún es especializado en el sector. Ayudé no sólo a ejecutar, sino también a optimizar la idea, buscando puntos de mejora e innovación”, dice. “La impresión en 3D y el corte a laser han cambiado la industria como un todo y tener un primer contacto ya en la universidad para hacer un producto funcional fue, sin lugar a dudas, un diferencial en mi formación”, finaliza.

Por su parte, para el área de Subsea, el desafío propuesto fue el desarrollo de un conjunto de prototipos capaces de confirmar la compatibilidad de los conectores de la flota de la empresa con las cabezas de pozos proporcionadas por el cliente, actuando a una profundidad de hasta 3 mil metros. La solución facilita la toma de decisiones y el análisis previo de la operación, lo que evita atrasos en el cronograma del pozo y, principalmente, pérdidas para Ocyan.

“Ver la capacidad creativa de los estudiantes es fenomenal. Los prototipos creados fueron un paso importante para el desarrollo técnico-científico en el área de petróleo y gas. Ellos permitirán ganancia de tiempo manteniendo la seguridad del proceso anterior y optimizando la operación”, destaca Cristiano, integrante del área de Subsea de Ocyan, también mentor participante en la iniciativa.

 #innovaryaprender

Iniciado en 2014, el proyecto consiste en la implantación de cursos extracurriculares de robótica para alumnos en 11 espacios makers en las escuelas de la red municipal de Macaé. Desde su implantación hasta 2018, más de 1.700 alumnos entre enseñanza básica, media y universitarios ya fueron beneficiados con la iniciativa, sea directamente o por acciones de formación de profesores (más de 90 capacitados en formación para tecnología). El impacto indirecto desde el inicio del proyecto ya alcanzó a más de 7.000 personas. El programa se originó en una alianza con la Secretaría Municipal de Educación de Macaé y el apoyo de la Universidad Federal de Rio de Janeiro (UFRJ).  En 2015, la UFRJ reconoció el proyecto como unidad curricular de extensión universitaria con más de 50 alumnos de Ingeniería actuando como monitores del programa.