Septiembre Amarillo refuerza la importancia de cuidar de la salud mental

¿Usted sabía que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada ocho personas en el mundo vive con algún tipo de trastorno mental diagnosticable? Este dato sugiere que, en este momento, alguien en su red de relaciones – o talvez usted mismo – puede estar enfrentando una batalla interna de naturaleza psicológica y emocional. Problemas de salud mental, como ansiedad y depresión, son cada vez más comunes, causando sufrimiento significativo para las miles de personas a su alrededor.

Septiembre Amarillo: un movimiento de esperanza

La campaña Septiembre Amarillo existe para recordarles a todos que nadie tiene que pasar por sus problemas y dificultades solo. Este movimiento surgió en los Estados Unidos, en 1994, después de la muerte de Mike Emme, un joven de 17 años que se suicidó. Conocido por su talento con mecánica, Mike restauró un Mustang 1968 y lo pintó de amarillo. Durante el funeral de Mike, sus amigos y familiares distribuyeron cintas amarillas con mensajes de apoyo a personas que podrían estar enfrentando dificultades emocionales. Los mensajes incentivaban a aquellos que necesitaban de ayuda a no sufrir en silencio y a buscar apoyo.

El suicidio es una de las principales causas de mortalidad en el mundo, siendo considerado un problema de salud pública. Realizada anualmente, la campaña Septiembre Amarillo busca sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de discutir el tema, combatir el estigma asociado a los trastornos mentales y, principalmente, ofrecerle apoyo a quien lo necesite. En Brasil, el movimiento es encabezado por el CVV (Centro de Valorización de la Vida), en colaboración con el CFM (Consejo Federal de Medicina) y la ABP (Asociación Brasileña de Psiquiatría).

El camino de la prevención

La psicóloga Raquel Calvalleri explica que el suicidio es la suma de diversos factores y destaca la importancia de un enfoque preventivo en la promoción de la salud mental. “El suicidio es el resultado final de un proceso, es un sufrimiento que va aumentando hasta el punto en que la persona se ve sin salida. Tenemos que mirar para la salud mental de una forma abarcadora, pensando en los diversos aspectos que contribuyen para su mantenimiento: la actividad física, la higiene del sueño, la alimentación, las buenas relaciones. Pensar en salud mental es pensar en calidad de vida de una forma general, porque así usted va creando factores protectores”, afirma.

La importancia del cuidado con la salud mental

La salud mental tiene un valor intrínseco y funcional en la vida de cualquier persona. Ella influye en la manera como pensamos, sentimos, tomamos decisiones y construimos relaciones, teniendo un papel decisivo en el desarrollo personal y comunitario. Cuando tenemos salud mental, estamos más aptos a tratar con los desafíos y estreses, adaptarnos a cambios, hacer elecciones complejas, manejar emociones y encontrar propósitos de vida.

Los especialistas creen que el aumento del número de casos de personas con trastorno mental pueda estar relacionado con los impactos del estilo de vida contemporáneo, marcado por el ritmo acelerado y las demandas constantes. La presión para ser productivo, competitivo y exitoso estaría contribuyendo al agotamiento mental y emocional de una gran parte de la población.

“Las personas deben repensar un poco la forma como ellas están tratando con las demandas de la vida contemporánea, en qué lugar ellas están poniendo el autocuidado en su lista de prioridades. Es necesario hacer una reflexión sobre sus propios hábitos, porque no existe una receta lista. Cada persona debe entender lo que funciona para si misma”, destaca Raquel.

Priorizar actividades que promuevan el bienestar, establecer límites claros entre trabajo y vida personal, fortalecer lazos con amigos y familiares, y reservar períodos sin el uso de dispositivos electrónicos para reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño son algunas estrategias para mantener una buena salud mental. Además de esto, es importante estar alerta para la identificación precoz de señales que pueden indicar algún tipo de trastorno. Cambios drásticos en el comportamiento, aislamiento social, pérdida de interés en actividades anteriormente placenteras y manifestaciones de desesperanza no deben ser ignorados.

Recuerde: la salud mental es esencial para una vida plena y satisfactoria. Septiembre Amarillo nos alerta de que no estamos solos y que siempre hay ayuda disponible. Actúe preventivamente, esté atento a usted mismo y busque apoyo de psicólogos, psiquiatras y otros profesionales ante los primeros síntomas de su cuerpo y mente. Usted puede contar con la ayuda de su seguro de salud para encontrar profesionales especializados en cuidar de su bienestar.