Agro: desde hace 10 años transformando la vida de las personas

Cícera Borges: “Mirando hacia atrás, nadie imaginaría una mujer operando un tractor. Y hoy en día es lo que más se ve. Es una felicidad enorme”

Odebrecht Agroindustrial completa hoy 10 años de actuación. En apenas una década, viene desarrollando un importante papel en el agronegocio brasileño. Se convirtió en el principal proveedor de etanol y energía eléctrica limpia del mercado nacional. Más aún: su rol es transformar la vida de miles de personas.

Con 11 mil integrantes, el Negocio acumula 6 millones de horas en capacitación, 400 mil participaciones y unos R$ 80 millones invertidos en cursos de capacitación profesional en sus nueve Unidades Agroindustriales.

Eber Santana, que trabaja en el Laboratorio del Polo Eldorado y es integrante de Agro desde su creación, es un ejemplo concreto de la inversión de la empresa en las personas. “Nunca creí que me convertiría en líder y que permanecería 10 años aquí. Tuve la oportunidad de concurrir a un curso superior y a un posgrado, siempre estimulado por la empresa. Son 10 años de muchos beneficios”, cuenta.

También desde hace 10 años como integrante, Cícera Borges, que trabaja con Tratamientos de Cultivos en el Polo São Paulo, se refiere al orgullo que siente de su profesión. “Mirando hacia atrás, nadie imaginaría una mujer operando un tractor. Y hoy en día es lo que más se ve. Es una felicidad enorme. Me encanta trabajar en la tierra”.

Creyendo en las personas

Solo en la última zafra, el Programa Creer (Acreditar) capacitó a 244 personas en 17 cursos de capacitación para la industria sucroenergética, mientras que el Creer Jr. benefició a 415 jóvenes. Durante el último año, Odebrecht Agroindustrial también creó el Proyecto Creer en la Diversidad, para la inclusión de Personas con Deficiencia en el mercado laboral. Desarrollado en el Polo São Paulo, el proyecto fue reconocido por la ONU en 2016, durante las celebraciones de los 10 años de la Convención de los Derechos de la Persona con Deficiencia.

Por medio del Programa Energía Social, basado en gestión participativa, la empresa mantiene su compromiso con las comunidades en que está inserta y ya invirtió más de R$ 21 millones en 72 proyectos desarrollados en las áreas de Salud, Educación, Preservación Ambiental, Cultivo y Actividades Productivas, beneficiando directamente a unas 150 mil personas.

“La llegada de la Unidad cambió nuestra ciudad. Mejoró la vida de todos”, señala Lucas da Silva, que trabaja como conductor en la Unidad Costa Rica. Él y su esposa, Dielma Pellet, que trabaja en el área de Servicios Administrativos, tienen dos hijos, ambos participantes del Proyecto Florestinha, realizado por Energía Social en el municipio desde 2015. “Espero que algún día mis dos hijos puedan trabajar en la empresa y sientan el mismo orgullo que tengo al llevar esta identificación en el pecho”.

Agro también cosecha buenos resultados en sus operaciones. Durantes estos 10 años, se produjeron 11.500 millones de litros de etanol, capaces de evitar la emisión de 23 millones de toneladas de dióxido de carbono en la atmósfera; 3,5 millones de toneladas de azúcar; y 9,5 mil GWh de energía eléctrica, comprobando que se puede vincular el crecimiento de la producción con la construcción de un futuro limpio.