Vea la entrevista con Marcelo Forma, socio de ICTS Outsourcing, responsable por el canal Linea de Ética

¿Cuándo los canales de denuncias pasaron a formar parte del día a día de las empresas?
Marcelo Forma: El mercado estadounidense es un fuerte influenciador de prácticas de conformidad. La FCPA (Foreign Corruption Practice Act) fue promulgada en 1977 y aún hoy se la considera un hito global en el combate a la corrupción. Más recientemente, países de Europa también dieron pasos importantes. En Brasil, este tipo de canal es relativamente nuevo. El gran impulsador fue la Ley Anticorrupción, de 2013. A las empresas se les comenzó a demandar más y herramientas como un canal de denuncias y un código de ética se convirtieron en pilares importantes en la gestión corporativa transparente.

¿Y cómo están las empresas brasileñas en este tema?
Marcelo Forma: Se encuentran en proceso de evolución. Ya se caminó bastante, pero todavía hay mucho por hacer. Ve algunos números. De acuerdo con un estudio promovido por ICTS llamado Nivel de Madurez de Compliance en Empresas Brasileñas, con 1417 participantes en 2017, el 66% de las empresas tienen un canal de denuncias, lo que significa un aumento del 30% con relación a 2015. Sin embargo, del 66% que tiene el canal, el 26% aún no tiene un proceso formal de investigación, tratamiento y registro exento de la información.

¿El modelo de gestión con apoyo de empresas tercerizadas es una tendencia?
Marcelo Forma: Sí, las empresas entendieron que para ampliar la efectividad y confiabilidad del canal es importante tener un aliado. Algunos puntos refuerzan esto. La exención y la confidencialidad del canal son factores fundamentales para quien está haciendo un relato. Tanto es que después de migrar a este modelo, se nota un aumento de cerca del 67% en la cantidad de relatos recibidos. Las personas se sienten más seguras y cómodas para hacer un relato y acaban participando más en el proceso y los resultados de las investigaciones son muy superiores. Éste es un movimiento que está intensificándose en Brasil en la última década.

¿Los canales como la Línea de Ética colaboran de forma efectiva para crear un ambiente transparente, ético e íntegro? ¿Cómo?
Marcelo Forma: Sin lugar a duda. Los canales reciben relatos que no llegarían a ser investigados si no hubieran sido comunicados. Hoy día, las personas tienen un papel más activo en la construcción de un ambiente transparente. El canal lo facilita. Datos de la ACFE (Association of Certified Fraud Examiners) muestran que, en las empresas que tienen algún canal de denuncias, el 39% de las irregularidades son identificadas por medio de relatos. Con ello, los desvíos se identifican el 50% más rápido y terminan impactando en 50% menos pérdidas financieras.

Sobre a ICTS Outsourcing
ICTS Outsourcing, que pertenece al grupo ICTS Protiviti, es la aliada del Grupo Odebrecht en la gestión del canal Línea de Ética desde mayo de 2017. Con vasta experiencia en el tema, fue pionera en la tercerización de canales de denuncias en empresas brasileñas. Suma más de 10 años de experiencia y 270 clientes.

¿Lo sabías?
¿La calidad de un relato impacta de forma significativa en la investigación, las deliberaciones y las consecuencias del hecho relatado?

Para asegurarles la mejor calidad a los relatos, el equipo que los recibe y analiza utiliza una técnica llamada SCAN (Scientific Content Analysis), creada en Israel en la década de 1980 y posteriormente desarrollada en Estados Unidos. La metodología se utiliza tanto por la web como por contacto telefónico. “La técnica es un elemento fundamental para analizar el contenido y tener éxito en la investigación”, destaca Marcelo Forma, socio director de ICTS Outsourcing.